miércoles, 31 de julio de 2013

A la hora de dormir


Por lo general a la hora de dormir dejaba al gatito fuera del cuarto, ya que en vez de acostarse y quedarse tranquilito Ciro parecía tomar la cama como un cuarto de juegos. Ideal para saltarme en la cabeza, para jugar con sus uñitas. En fin, imposible dormir en esas condiciones, así que desde un primer momento se acostumbró a que llegada cierta hora la puerta se cerraba y él quedaba del otro lado.

Sin embargo, cada tanto intentaba darle la oportunidad de que se quedase a la noche conmigo. Por lo general terminaba siendo expulsado del cuarto al rato por las razones antes mencionadas. Pero últimamente se está portando mejor. Y ya logré que se quedara tranquilito varias noches, durmiendo al ladito mío. Empezó la semana pasada que hizo tanto frio.

Ayer fue especialmente lindo, me dio mucha ternura. Eran como las cuatro de la mañana cuando siento la patita del gato sobre mi mejilla. Suavecita, tierna. Abri los ojos y le dije: “Cirito, hay que seguir durmiendo todavía”. Como si me entendiera, se volvió a hacer un bollito a mi lado. Poco antes de las siete de la mañana, sentí su naricita sobre mi rostro. También muy suave, como una caricia. Volví a decirle: “Cirito, nos queda media horita todavía, sigamos durmiendo”. Y nuevamente se acomodó y se acostó de nuevo.

Finalmente sonó el despertador, no me quedaba otra que levantarme, y el gatito lo hizo conmigo.

Me dio mucha ternura como me buscó y entendió en ambas ocasiones que todavía no era la hora de levantarnos. Tiempo atrás esto hubiera sido impensable. Se ve que el minino está creciendo.

martes, 30 de julio de 2013

Reflexiones, y un post que no salió a la luz


Creo que es la primera vez que escribo un post y lo borro sin siquiera publicarlo. Ya les conté que suelo escribir lo que me sale en el momento, y sin mayor análisis lo dejo conocer al mundo. Que prácticamente ni los releo más que superficialmente para asegurarme que la ortografía es correcta (porque si algo no me gusta es que no se cuide este aspecto).


Pero esta vez apreté el “delete” y dejé atrás todo lo escrito. ¿Por qué? Eran reflexiones que me hacía, sobre las diferencias que encontraba entre mi ex y yo. Y en realidad ni siquiera había surgido pensando en él, sino en comentarios positivos que me hicieron mis conocidos sobre mi nueva pareja, mencionando que “era más para mí”. Y les contaba que así lo siento a pesar de que estamos saliendo hace pocos meses. Y a partir de eso les decía que me había venido a la mente mi relación anterior y la cantidad de cosas en que éramos diferentes. Y también escribía sobre como si bien esas diferencias (que por otro lado siempre existen en mayor o menor medida) no habían impedido que pasáramos juntos años lindos, que nos sirviera en su momento, pero que podían explicar el porque se llegó al desenlace que hubo. En fin, luego venía la lista de las cosas en que éramos realmente muy distintos, en formas de ser, en gustos, etc.

Después me puse a pensar que todo eso no tiene sentido ser enumerado ahora. Que ya es parte del pasado. Que tuvo cosas buenas y otras no tanto (¿y que pareja no es así?). Que es parte de la experiencia vivida, y que sigo pensando que todo lo que uno vive le hace ser quien es. Tal vez todo eso me hace valorar más ahora otras coincidencias o encuentros.

Así que voy a intentar reescribir la primera parte de ese post que no llegó a salir a la luz, y dejar de lado la otra. Comenzaba más o menos así:

Ya antes de conocerlo mi mamá me dijo: “Se nota que este chico es más para vos por lo que me fuiste contando. Que tienen personalidades más parecidas, formas de ser más compatibles”.

Y es lo mismo que me dijeron varias amigas antes de haberlo visto: “es más para vos”.

Y luego de conocerlo las impresiones son las mismas, así me lo hicieron saber.

Y eso me hace feliz. Y quiero seguir pidiéndole al universo que todo siga tan bien como hasta ahora, que esto tan lindo siga creciendo.

lunes, 29 de julio de 2013

A puro festejo


Antes que nada quería agradecerles a todos los que por este medio me han saludado por mi cumpleaños, con expresiones llenas de cariño y buenos deseos. ¡Qué lindo recibir tantos saluditos!

Han sido estos unos días muy especiales, llenos de festejos y cosas lindas. Lo pasé muy bien realmente, no puedo quejarme.

Ya el viernes, día propiamente en el que estaba cumpliendo añitos, lo comencé de la mejor manera. En el trabajo me esperaban con cartelitos, y me habían organizado un almuerzo. Fuimos un grupo a un restaurante cercano en donde habían hecho una reserva. Lindo el lugar, y rico todo. Me sorprendieron con una torta, y hasta con un regalo. Esto para mí fue muy especial porque no es algo que se suela hacer aquí. En otros trabajos en donde estuve se tenía la costumbre de juntar plata entre varios para comprarle algo al homenajeado, pero en esta oficina no se hacía (por lo menos no en mi sector). Por eso cuando en el almuerzo me entregaron un libro y una tarjeta firmada por todos me emocioné. Fue un lindo gesto de parte de mis compañeros.

A la noche tuve el festejo familiar. Hicimos un asado, y como les contaba fue la presentación de mi chico a la familia. Por suerte salió todo muy bien, todo natural, y de lo más agradable. Fue el perfecto terminar para ese día.

El sábado me encontró haciendo limpieza y comprando cositas para el festejo del día siguiente. Eso no impidió que durmiera una siestita, ya que a la noche tenía joda hasta tarde. Pasaron por casa unos amigos, con los que compartimos unas pizzas, y luego nos preparamos para ir a una fiesta de disfraces. Hace mucho que no iba a una, y resultó de lo más divertida. Todos se esmeraron con las caracterizaciones, y salvo algunos con temática repetida (piratas, vaqueros, etc) el resto eran bien diferentes uno de otro. Mucho ingenio, y ganas de pasarla bien. Bailamos hasta tarde, por lo que al día siguiente me costó un poco levantarme.

El domingo fue la reunión con amigos. Varios vinieron, y otros tantos faltaron. Siempre me da un poco de tristeza por la gente que no viene, pero trato de concentrarme en lo que sí lo hicieron. Este año fue por tandas, algunos llegaron más temprano y se fueron antes, otros llegaron más tarde y se fueron después. Por eso nunca llegamos a ser un grupo demasiado grande, lo cual por un lado está bueno ya que se pueda charlar y compartir más con cada uno.

Como siempre soy de comprar comida de más, pensando en que no falte, así que me sobraron un montón de cosas. Tengo sandwichitos y cosas dulces para rato. Eso es un tema ya que tanto festejo me dejó un poco más de peso en la balanza. Será cuestión de volver a la buena senda (¡como me está costando eso últimamente!), y tener todo eso en la heladera no ayuda.

Algo a mencionar es como se portó mi gatito Ciro con tanta gente dando vueltas por la casa estos días. El viernes tuvo un momento de ponerse medio histérico el gato. Resulta que como íbamos a tener abierto el acceso al patio (por la parrilla) y para que no se escape, mi papá le trajo un pretal con una soguita. Esto era de un gatito que habíamos tenido de chicos (y lo habíamos usado en un par de ocasiones en que lo habíamos llevado de vacaciones). La cuestión es que el tema del pretal no le gustó nada. Enseguida quiso sacárselo, y estuvo muy nervioso por eso. Decidimos que era mejor retirárselo y cuidar que no saliera al patio. Ahí mejoraron las cosas.

El sábado se portó bien, no les hizo mucho caso a los invitados pero tampoco molestó. Eso sí, encontró que todos los abrigos que la gente había dejado en el sillón eran de lo más cómodos, y se tiró a dormir arriba de ellos.

El domingo si me sentí orgullosa del gatito, ya que había un par de niños dando vueltas por la casa, pero se portó muy bien. Los chicos por supuesto lo buscaban con bastante efusión. Ciro tuvo un par de momentos de meterse prudentemente debajo de la mesa, pero por otro lado los buscaba a los chicos. Era gracioso de ver, ya que parecía contento con el jugar con ellos. No solo no los atacó, sino que tampoco se asustó, y se podría decir que hubo una buena convivencia niños- gato. Y a pesar de la gente yendo y viniendo, él estuvo de lo más tranquilo por ahí.

En resumen, un fin de semana estupendo, a puro festejo. ¿Ustedes como lo pasaron?

domingo, 28 de julio de 2013

Reto de las 52 semanas - Foto Nro. 30

Hoy domingo les estoy mostrando la foto Nro. 30 del desafío de las “52 semanas”. Es el pequeño escenario donde tocaron unos artistas que fuimos a ver con mi nuevo chico el día anterior a irnos a Mar del Plata.

Uno de los que se presentaba era el profesor de guitarra de él (¿les conté que sabe tocar este instrumento? Es de aficionado, pero toca lindo). El lugar era bastante chiquito y les diré que el público bastante exclusivo (lo cual es otra manera de decir que eran todos familiares o conocidos). No seriamos más de 20 personas. El show era sobre tango, y fue bastante interesante. Quien cantaba tenía una voz muy apropiada para eso, era el timbre correcto que uno espera en este tipo de música.

La cuestión es que pasamos un bonito momento, cerrando la semana con algo distinto.

¿Son de ir a escuchar artistas en vivo? ¿Qué música prefieren?

sábado, 27 de julio de 2013

Dibujo en pastel tiza: mujer pensando

La profe del taller de dibujo me sugirió llevar imágenes en donde la persona esté con la cabeza para arriba, o para abajo, con el fin de practicar el rostro humano en una de esas posturas. Encontré en internet una foto de una mujer en actitud de pensamiento, y esa es la que use la clase pasada para inspirarme.

El dibujo que salió me gustó. Fue realizado en pastel tiza, y tal vez a diferencia de otros anteriores que venía haciendo le remarqué más algunos trazos. No sé si en la foto que les adjunto se nota tanto esto último, pero el efecto quedó bastante bien.

¿Qué les parece? ¿Les gusta?

viernes, 26 de julio de 2013

Feliz cumpleaños a mi



Hoy estoy cumpliendo años, asi que estamos de fiesta por este espacio!!  (pasen, pasen, que hay torta y sandwichitos)

Happy birthday to me!!!

33 añitos, llevados con alegría. Con ganas de celebrar, y seguir sorprendiéndome por la vida. Los planes de festejo ya se los dije ayer. Después les cuento que tal salió todo. Los tres deseos que voy a pedir al soplar las velitas me los guardo para mi así se cumplen (tengo mis cábalas al respecto).

En fechas así uno suele hacer algunos balances (y yo soy contadora, así que a mi juego me llamaron). Los 32 fueron moviditos y movilizadores, pero el saldo para mi es positivo. Estas son algunas cosas que me han sucedido en este último año de vida:

* Empezar un taller de dibujo y encontrar una veta creativa que no conocía que tenía.

* Enterarme de que la empresa donde trabajo se ponía en venta. Pasar los nervios que todo eso implicó, con las idas y venidas, los rumores y la poca información que nos pasaban,  hasta que finalmente se vendió.

* Relacionado con lo anterior, pasar por todo el proceso de mudanza a las nuevas oficinas. Un poco de nervios, un poco de estrés, de entorno de caras largas, pero a estas alturas ya todos más instalados y relajados. De a poco adaptándonos al nuevo sitio.

* Viajar a la ciudad de Paraná, en un fin de semana totalmente lluvioso.

* Solucionar un problemita con una querida amiga, y encontrarnos ahora más unidas que nunca.

* Encontrarme con una situación que no esperaba con quien fue mi pareja durante 8 años. Sufrir tres meses por todo eso, y luego decidir separarme. Terminar el 2012 con esta decisión, que fue difícil de tomar pero al mismo tiempo resultó liberadora y positiva. Un proceso de crecimiento sin duda, optando por decidir en base quien soy, y a lo que quiero y lo que no quiero para mi vida.

* Hacer un curso de meditación que me llenó de energía.

* Replantearme vacaciones e irme para el sur, en lo que resultó ser un viaje absolutamente maravilloso.

* Compartir con gente buena onda un montón de lindas salidas.

* Conocer a una personita que se está ganando mi corazón, ilusionarme nuevamente.

* Hacer un viajecito a Mar del Plata, y pasarlo realmente fantástico.

 En fin, un breve resumencito de algunas cosas importantes del último año, y esperando que los 33 sean tal vez más tranquilos, pero me brinden igual la posibilidad de seguir creciendo, de seguir contando con la gente que quiero, de tener nuevos proyectos.

Decido empezar los 33 con la misma predisposición a ser feliz, a ser positiva, a disfrutar de lo que la vida tiene para darme.

Gracias por pasar por este espacio y compartir conmigo este día especial.

jueves, 25 de julio de 2013

Se vienen los 33..

Mañana cumplo años. Treinta y tres juveniles inviernos en mi haber. Todavía puedo decir que me encanta el día de mi cumpleaños, me gusta festejarlo, y todo lo que eso implica. El juntarse con la familia, el reunirse con amigos, el celebrar con la gente que uno quiere. El recibir saludos, llamados, mensajitos, besos, regalitos. En fin, todo eso.

Y como me gusta festejarlo, estoy encargándome de los preparativos.

Mañana entonces la idea es ir a trabajar (imposible zafar de esto), y al mediodía ir a almorzar con mis compañeros a algún lugar lindo de la zona. En la oficina se acostumbra que además el homenajeado lleve algo para compartir con el resto, por lo que ya compré unos chocolates con ese propósito.

A la noche van a ir a casa mis padres, mi hermano con su novia, y mi nuevo chico. Va a funcionar como presentación oficial con mi familia, ya que todavía no se conocen. Como ya vamos casi seis meses juntos y todo marcha bien, me pareció un buen momento para este encuentro. Estoy segura de que va a salir todo bien, ya que él acepto enseguida mi invitación, y ellos ya sin conocerlo lo quieren porque ven como yo estoy (de hecho mi mamá me decía que por lo que le fui contando notaba que tenemos mucha compatibilidad en formas de ser, etc). Espero que efectivamente salga todo como espero. Se ofreció él a preparar un asado, con lo cual estaría estrenando la parrilla que tengo en el patio de casa (si, aunque ya llevo casi dos años viviendo ahí no la había estrenado, aunque eso parezca raro en el país de la carne).

El festejo con amigos lo voy a estar haciendo el domingo. Por lo general suelo festejarlo con alguna reunión el sábado a la noche, pero en esta ocasión tengo una fiesta de disfraces (pinta divertido, luego les cuento mejor), y por eso decidí posponer la celebración para el día siguiente. La idea es hacer una merienda, algo tranquilo en casa. Para esto ya empecé a ver que necesito. Acabo de encargar algunas cosas de lunch en una rica confitería (auch! Que caro está todo…), y el resto lo iré comprando en el supermercado. El sábado me toca un día atareado con estas cositas, con la limpieza de la casa, etc. Pero la verdad es que me encanta hacerlo, es un día que me gusta compartir con la gente que quiero. Bien vale los pesos gastados (¡menos mal que es una sola vez al año!)

¿a ustedes les gusta festejar el cumpleaños? ¿Qué suelen hacer?

miércoles, 24 de julio de 2013

Respondiendo preguntitas - Premio Liebster Award


La querida "Plagiando a Mi alter ego", quien ya va por su octogésimo segundo premio (sorprendente!) me ha pasado el “Liebster Award”. Además de agradecerle la gentileza, cumplo con lo que este pide.
 

Las normas son responder a las once preguntas planteadas, formular otras once y pasar el blog a once blogs.

 Las preguntitas son las siguientes:

1.- Blog: ¿vocación o profesión?.

 

Vocación, hobbie, o como quieran llamarlo. Escribo por el mero gusto de hacerlo, porque es un espacio para mí, que comparto con quienes me leen.

2.- ¿Cada cuánto debemos publicar los post?

Yo publico cuando se me ocurre, que es bastante seguido. Pero no porque “deba” hacerlo, sino porque así me sale.

 3.- ¿Cuáles son a tu juicio las herramientas más útiles para promocionar el blog?

 Como a mi blog no lo promociono prácticamente (ya les conté de su carácter de “secreto” entre mis conocidos), lo que creo me ha hecho llegar más seguidores es que yo también visito otros blogs. Yo visito, otros me visitan, y se va haciendo una cadena. Una especie de “boca a boca”, aunque tal vez sea más correcto decir “click a click”.

4.- ¿Temática única o multicontenidos?

 Mi blog es multicontenidos. Aquí pueden encontrar las cosas más diversas. La mayoría de mis post son sobre cosas cotidianas. Me gusta hablar de lugares que visito, de mi ciudad, de salidas, de mi gatito, mostrarles mis dibujos, compartirles algún cuento o reflexión. En fin, habla sobre la vida misma.

5.- ¿Por qué iniciaste el blog?

Por tiempo de sobra que tenía en la oficina, y sugerencia de quien era mi novio en ese momento. Y así en poquito tiempo me volví adicta a este mundo blogger, que me ha traído muchas satisfacciones.

6.- ¿Por qué elegiste el tema?

No hay tema. Van surgiendo sobre la marcha.

7.- ¿Es necesario añadir contenidos multimedia a los post?

 Me gusta agregarle fotos o imágenes a los post. Hace la lectura más amena.

8.- Querrías mejorar...

No se me ocurre ahora algo.. ¿sugerencias?

9.- ¿Qué es lo que te gustaría conseguir?

 ¿Con el blog? Nada en especial. Seguir teniendo el feedback que encontré con mucha gente linda de este mundito virtual, poder seguir compartiendo cosas.

10.- ¿Hasta cuándo?

No es algo que me plantee. Mientras me gratifique y tenga tiempo lo seguiré.

11.- Gracias a....

Todos ustedes por estar del otro lado, por brindarme tanto cariño. Gracias por pasarse por “Mi pequeño gran mundo” y generar tantas cosas lindas.

 
Ahora si, paso el premio a 11 blogs, y los invito a contestar las mismas preguntas.











martes, 23 de julio de 2013

Frio, mucho frio..


En Buenos Aires está haciendo frio. Mucho frio. De ese que cala los huesos, de ese que provoca pereza terrible para salir, con el que uno quiere quedarse encerrado y tomando infusiones calientes. Una verdadera ola polar.


Me divertía ayer mirar al gato, como estaba pegado a la estufa. Creo que si hubiera podido meterse adentro el bicho lo hacía. La naricita pegada al aparato, buscando absorber todo el calorcito. Y lo más gracioso es que al rato yo estaba parada al lado del minino, buscando lo mismo. Y si hubiera podido meterme adentro ¡creo que también lo hacía!

A mis lectores del hemisferio sur, ¿Cómo los está tratando el frio?

Ayer a la noche juro que me costaba entrar en calor. Tenía algunas mantas, pero el cuarto estaba helado, y por momentos tiritaba en la cama. Me daba fiaca igual levantarme (¿asomarme al frio? Nooooo!!) para agarrar mas frazadas.. así que lo soporté. Lo sufrí para ser sincera.

Y a todo esto yo pensaba en que si a mí que estaba bajo techo y cubierta de mantas me estaba costando tanto, como estaría la gente que no tiene donde dormir, que está en situación de calle. Debe ser terrible. Una vez más agradezco tener mi lugar calentito, con la posibilidad de buscar otra manta de tomar coraje para levantarme en medio de la noche. Agradezco el poder contar con abrigo para ponerme,  el hacerme una taza de té humeante, o tener un plato caliente para comer.

Sepamos valorar lo que tenemos, que es mucho.

lunes, 22 de julio de 2013

Hoy compartimos.. "Algo que me dijo mi abuelo/a"


Nuevamente ha llegado un día de quedada “Hoy compartimos”. Y como desde hace rato ya, vuelvo a participar en ella.

Para quien este hace poquito visitando mi espacio, les cuento que este es un día en que nos ponemos de acuerdo con otros blogs de diferentes partes del mundo y hacemos post sobre un tema en común. Cada uno desde su perspectiva, por lo que salen cosas bien diferentes e interesantes.

El tema de hoy es: “Algo que me dijo mi abuelo/a”.






Cuando nos comunicaron el tema elegido, he notado que la mayoría expresaba que era algo sobre lo que le entusiasmaba mucho escribir. En mi caso, debo admitir que me pareció algo difícil (pero no por eso iba a quedarme afuera, y acepté el desafío sin pensarlo mucho).

Las razones de que para mí este no fuera un tema fácil es que no tuve mucha suerte con mis abuelos, que distaban de la imagen cariñosa y afectuosa que se suele tener con ellos.  De mi abuelo paterno poco puedo decir ya que no llegué a conocerlo (murió siendo mi papá chico). De mi abuela paterna ya les comenté que era algo así como la bruja de los cuentos. Una persona bastante fría, muy dedicada a su trabajo pero poco a la familia. Les relaté algo de esto cuando en este post les hablé de la etapa de mi vida en que con mi familia nos mudamos a su casa. Así que no tengo de ella recuerdo de algún mensaje importante que me haya dado, ni nada que me haya marcado mucho. Simplemente no nos daba mucha bolilla, ni compartía grandes cosas.

Con el lado materno no tuve mejor suerte. Fueron gente que se portó bastante mal. Aunque su hija (es decir, mi mamá) los ayudó siempre un montón, se sacrificó mucho para que ellos pudieran estar bien (incluyendo el trabajar extras y apoyarlos con gran esfuerzo para comprar una casita, cosa que ellos nunca habían podido hacer). Sin embargo, por esas cosas que a veces pasan en la vida (y que francamente cuesta entenderlas), lo que ellos hicieron fue darle la espalda (y por supuesto en consecuencia a los nietos nos hicieron lo mismo). Sin motivos entendibles se alejaron, causándole una gran pena a mi mamá. Yo tenía 7 años cuando todo esto pasó, así que poco es lo que me acuerdo de la etapa anterior que tenga que ver con ellos. Si me acuerdo de mi mamá llorando por este gran desprecio que le habían hecho (en especial me viene a la mente un día en que mi mamá estaba sentada en el suelo sin poder contener el llanto, y yo abrazándola y queriendo que se pusiera bien, con impotencia porque poco podía hacer más que esto). Si recuerdo el sentir que era todo muy injusto, porque la veía sufrir, y ella les había dado todo. Y no se merecía ese trato, ni tampoco nosotros. Esta situación con los años mi mamá la pudo ir manejando, y llegó a perdonarlos. No sé si a entenderlos, pero si a perdonarlos. Y creo que eso es de valientes, ya que se requiere mucho corazón y coraje para perdonar a quien te ha hecho tanto daño.

A mi abuela nunca la volví a ver. Murió cuando yo tenía 20 años, y sin haber dado el brazo a torcer. Pobre de ella, ¿no? se perdió el ver crecer a sus nietos. Se perdió tantas cosas que podrían haber sido tan lindas, pero fue gracias a una mala decisión de su parte.

Mi abuelo en cambio con los años apareció. Creo que estaba arrepentido de lo sucedido. Creo que para el final de sus días supo darse cuenta del error. Buscó entonces recomponer un poco las cosas. Mi mamá lo aceptó, y lo ayudó en todo lo que pudo. Nuevamente se preocupó en cuidarlo y ayudarlo a que pasara esos años de la mejor manera posible. Trató de acompañarlo, de llamarlo por teléfono todos los días, sacarlo a pasear, compartir, de recomponer el vínculo. Yo debo admitir nuevamente que nunca pude hacerlo del todo. Simplemente para mi era un señor grande que cada tanto veía, pero me costaba aceptarlo como un abuelito amoroso. No había estado en todos esos años. Nunca lo pude querer demasiado entonces.

¿Me dijo algo este señor que sea digno de contarles a ustedes? Intento recordarlo, pero no me viene nada a la mente. Por eso es que decido reformular un poco el tema del post (esperando que mis compañeras de quedada no se enojen) y contarles que me enseñaron estas circunstancias relacionadas con mis abuelos. Y no desde lo que ellos en si me hayan enseñado, sino por lo que observé en la actitud de mi mamá ante el tema.

Mi mamá podría haberles guardado rencor. Podría haberse quedado llorando eternamente por esas circunstancias tristes que la vida le ofrecía. O también haber repetido la historia y actuado de la misma manera con los suyos. Pero en cambio ella hizo frente a las circunstancias. Pudo decidir ser mejor persona que ellos. Pudo escoger poner su empeño en revertir la historia, en llenar a su familia de afecto. Y eso es lo que hizo. Yo no tuve suerte con mis abuelos, pero si lo tuve con mis padres. Dos personas afectuosas que siempre me han apoyado, que han demostrado a su manera un increíble amor. Seres que pese a las circunstancias adversas con sus respectivos padres lograron ser diferentes. Y eso para mí vale mucho.

Rescato también el que a pesar de tanto daño recibido mi madre haya logrado perdonarlos. Porque sé que eso no es fácil, porque yo ni siquiera lo logré demasiado. Y como les decía algunas líneas atrás, para mí eso es de una persona valiente y de gran corazón.

Para mí esto es un ejemplo importante, una lección de vida. Trato de ver el lado bueno en las cosas que no lo son tanto, así que escojo esta frase para resumir: siempre se puede revertir la historia. No importa que tan adversa sea la situación que la vida nos presenta, siempre se puede escoger actuar bien, hacerle frente, y seguir luchando.

Ahora si, los invito a leer los post de mis compañeras, los cuales seguramente incluirán lindas historias y mensajes de sus abuelos.

La fragua
Amor por la decoración
Nika Vintage
Podemos charlas juntas
El perro de papel
Mi pequeño gran mundo
A quien pueda interesar
Manualizando
Ruth simple life
Lo veo y me gusta
Casa Mairim
Vainilla, coco y algo más
Fetiches de cartón
El horno de mami
Mums and kids Madrid
I want it I need it 
Historias y pinturas
El nido de mamá gallina
Mamy a la obra
You planter
La bici azul
Mabel's Kitchen

sábado, 20 de julio de 2013

Dia del amigo

Hoy se festeja el día del amigo en Argentina. Hace justo un año hice post en el que contaba el origen de esta celebración.


Es una fecha que me gusta, si bien todos los días se debería celebrar la amistad. Esta es una de las cosas más bonitas de la vida, sin duda uno de los mejores tesoros. Que siempre podamos contar con amigos sinceros, que siempre podamos ser nosotros un buen amigo para otro.

Como a través del blog uno estrecha lazos, quiero desearles un feliz día a todos ustedes, los que siempre están del otro lado con un comentario, con un apoyo, con una sonrisa, con sus cálidas palabras.

Les dejo también a modo de regalo frases que encontré en internet, las cuales invitan a reflexionar.

 Con el tiempo te das cuenta de que los amigos verdaderos valen mucho más que cualquier cantidad de dinero.


Con el tiempo entiendes que los verdaderos amigos son contados, y que el que no lucha por ellos tarde o temprano se verá rodeado solo de amistades falsas.


Con el tiempo aprendes que las palabras dichas en un momento de ira pueden seguir lastimando a quien heriste, durante toda la vida.


Con el tiempo aprendes que disculpar cualquiera lo hace, pero perdonar es solo de almas grandes.


Con el tiempo comprendes que si has herido a un amigo duramente, muy probablemente la amistad jamás volverá a ser igual.


Con el tiempo te das cuenta que aunque seas feliz con tus amigos, algún día lloraras por aquellos que dejaste ir.


Con el tiempo te das cuenta de que cada experiencia vivida con cada persona, es irrepetible.


Con el tiempo te das cuenta de que el que humilla o desprecia a un ser humano tarde o temprano sufrirá las mismas humillaciones o desprecios multiplicados.


Con el tiempo aprendes a construir todos tus caminos en el hoy, porque el terreno del mañana, es demasiado incierto para hacer planes.


Con el tiempo comprendes que apresurar las cosas o forzarlas a que pasen ocasionará que al final no sean como esperabas.


Con el tiempo te das cuenta de que en realidad lo mejor no era el futuro, sino el momento que estabas viviendo justo en ese instante.


Con el tiempo verás que aunque seas feliz con los que están a tu lado, añoraras terriblemente a los que ayer estaban contigo y ahora se han marchado.


Con el tiempo aprenderás que intentar perdonar o pedir perdón, decir que amas, decir que extrañas,decir que necesitas, decir que quieres ser amigo.... ante una tumba..., ya no tiene ningún sentido...


Pero desafortunadamente....SOLO CON EL TIEMPO.... y como aún es tiempo... mandemos muchísimos saludos a todos... a los que ya no estamos juntos, por todos los momentos buenos y malos que nos toco vivir.. y a los que ahora estamos unidos , pasando momentos geniales.. gracias por estar...


Y recuerda estas palabras "EL HOMBRE SE HACE VIEJO MUY PRONTO Y SABIO MUY TARDE" (justamente cuando ya no hay tiempo..)

viernes, 19 de julio de 2013

Reto de las 52 semanas - Foto Nro. 29


¡Finalmente llegó el viernes! Día de compartir con ustedes la foto Nro. 29 del desafío de las “52 semanas”. La que hoy escojo está relacionada con los dos post anteriores. Fue sacada en el viaje a Mar del Plata, y es nada menos que la personita que está ganándose mi corazón. De atrás, medio borrosa tal vez, pero quería mostrarles un poquito de él.

Como verán tiene el pelo cortito (como le crece mucho se lo corta seguido). Es un poquito más chico que yo (9 meses, lo cual a esta altura de la vida no es nada), y dueño de una sonrisa que me atrapa (aunque no puedan verla en la foto, es asi). Es de tener inquietudes en hacer y aprender cosas, posee buen humor, es sociable, le encanta leer, tiene una sensibilidad especial hacia la música. Es quien me hace suspirar y sonreír a cada rato.

Se nota que me tiene medio embobada, ¿no? :-)

Buen fin de semana para todos!! Que lo pasen realmente genial!

jueves, 18 de julio de 2013

El comienzo

En el post anterior les conté algo lindo que estoy viviendo, esta nueva oportunidad que me está dando la vida en cuanto al plano sentimental. Como les decía, esperé a que pasaran unos meses para hablarles al respecto, porque quería ir viendo cómo se iban dando las cosas. Desde un principio fueron lindas, pero por cábala quise guardármelo para mí, por un tiempo, asegurarme que no les estaba contando solo de un amor de verano (por lo menos ya vamos por el otoño y el invierno, y ojalá que mucho más).

La cuestión es que hoy me encuentro con ganas de contarles un poquito de esta historia, de este motivo de corazón contento, de la causa de las maripositas en mi estómago, de mis sonrisas en cualquier lado en que me encuentre cada vez que pienso en él.

Vamos al principio, ¿les parece? Y para eso me voy a remontar al mes de enero, a las vacaciones.

Como saben, el 2013 lo empecé como una hoja en blanco. La vida me estaba diciendo que debía barajar de nuevo las cartas, que era tiempo de jugar una partida diferente a la que había estado jugando. Habiendo tomado la decisión de separarme de la persona con quien había convivido los últimos años, era momento de reencontrarme conmigo misma. Desde un primer momento me sentí fuerte, y con esa sensación de que todo podía pasar, de que lo mejor estaba por venir, de que era un tiempo para crecer. Mi lema fue dejar todo fluir. Y estaba preparada para lo que la vida me trajera. Si venía un tiempo de estar sola lo aceptaba, lo mismo que si llegaba el conocer a alguien. Sabía que todo llega en el momento en que debe hacerlo, así que simplemente me propuse dejarme sorprender por la vida. Y la verdad es que fue una gran sorpresa que en tan poco tiempo apareciera una persona como él, que movilizara así mi mundo. Sentía que el universo me iba a acercar a alguien así, pero no sabía que tan pronto.

Volviendo entonces al verano, yo tenía desde diciembre un pasaje de avión para lo que iban a ser mis vacaciones con mi ex. Llamé a la aerolínea, cancelé el vuelo, y me dediqué a hacer nuevos planes. Así fue como me contacté con una agencia que organiza viajes en grupo, con la que yo me había ido al sur varios años antes. Recordaba que lo había pasado genial, y que era una linda forma de conocer gente. Y a mí eso me venía bárbaro porque dada la proximidad de la fecha (yo ya tenía pedidos los días en el trabajo, etc) no tenía que preocuparme de temas como hospedaje y traslados (ya era un paquete armado), e iba en compañía de otra gente con ganas de pasarla bien. Negocio redondo.

 Ya les había contado que el viaje hacia el sur lo hicimos en un micro, el cual era exclusivo para la agencia. Y que ya en la ruta empezamos a conocernos entre todos, por medio de juegos, de charlas, de guitarreadas. Se iban armando grupos de gente que charlaba entre si, conociéndose. Y dio la casualidad de que él conocía a una chica que estaba sentada bastante cerca de donde yo estaba. Por eso fue a saludarla y se quedó dentro del grupo con el que estábamos charlando. Y así empezamos a charlar nosotros también. Desde un primer momento me cayó muy bien. Aun cuando no lo miraba como hombre, sino como una persona que estaba conociendo, me sentí muy cómoda. Durante la charla empezaron a surgir muchos temas en común. Comenzamos hablando de literatura (es tan amante de los libros como yo). Resultó que había leído uno de los últimos libros de Ken Follet, autor que me encanta (y del que la mayoría de la gente a la que se lo menciono no tiene ni idea). Coincidimos en unos cuantos autores y libros, en el estudio del idioma portugués (que más tarde me enteré lo había hecho en el mismo instituto que yo), y en muchas cosas más. En un momento lo tuve sentado en el asiento al lado mío (que estaba vacío), y del que no se movió más.

Así pasaron los primeros días del viaje. Lo tenía con frecuencia al lado, nos poníamos a conversar un montón. Por supuesto que me daba con el resto del grupo, pero siempre terminábamos coincidiendo y estando cerca. O él me buscaba o yo lo hacía. En todo caso creo que ambos nos buscábamos un poco. Empecé a verlo con otros ojos, me empezó a gustar.

Una noche de finales de enero, luego de haber pasado un día espectacular en Lago Puelo, estábamos compartiendo con todos un fogón. Yo lo tenía sentado al lado mío, y cuando varios propusieron seguir la noche tomando algo junto al río (que estaba cerca del lugar donde nos alojábamos) él se acerca a mi oído y me pregunta en un susurro “¿te quedas un ratito conmigo?”. Lo miré y le dije que sí. Y esperamos que se fueran yendo todos. El les dijo que se iba a encargar de apagar el fuego. Algunos se dieron cuenta de que yo me quedaba también ahí (y con complicidad fueron apurándose con un “vamos, vamos, que molestamos”), otros fueron para el río y no se percataron de nada. La cuestión es que cuando estuvimos solos nos miramos y sin necesidad de decir nada nos dimos un hermoso beso. El primero de unos cuantos. Y nos quedamos ahí abrazados un rato junto al fuego. Y ese fue el comienzo de todo.

martes, 16 de julio de 2013

Mar del Plata (y algo mas..)

Ahora sí, tengo acá algunas fotos sacadas este fin de semana en la mini escapadita a la ciudad de Mar del Plata. Por lo tanto les cuento un poquito de este hermoso viaje.
Cabaña en medio del bosque Peralta Ramos

Hermoso el mar
Mar, pescador, escollera, y unas cuantas nubes
Salimos por la mañana del sábado, a eso de las siete de la mañana. Al haber coincidido con el inicio de las vacaciones de invierno en los colegios esperaba que la ruta estuviera más congestionada. Pero por suerte no había casi autos, así que fue un viaje rápido. Demoramos un poquito más de cuatro horas en hacer los 400 km de distancia que hay entre esta ciudad y Buenos Aires.
pajaritos en una planta (¿no estan divinos?)

El primer destino fue la cabaña que teníamos reservada, la cual quedaba dentro del bosque Peralta Ramos. Este es un bosque de 400 hectáreas con árboles de coníferas, sauces, eucaliptos, álamos y rosales. Dentro del bosque existe un barrio residencial. La cabaña estaba ubicada cerca de uno de los extremos del bosque. Un sitio chiquito pero muy agradable. Por el frio no daba para estar aprovechando mucho la parte exterior, pero el lugar contaba con un jardín con mesitas, una parrilla, etc. En fin, bien equipado y acogedor.

escultura tributo a Sui Generis
plaza con fuente
Ese primer día estaba todo bastante nublado. Con abrigo igual fuimos a recorrer un poco la costanera. Pasamos por varias playas, de esas que de nombre había escuchado mil veces pero recién ahora estaba conociendo: La Perla, La Bristol, la zona de Punta Mogotes, etc.

Recorrimos también la calle peatonal, que cuenta con unos cuantos negocios, y tomamos una rica merienda en el tradicional restaurante “Manolo”.

Postal del puerto
Conocí algunas plazas y edificios simpáticos de ver. Hicimos recorrida por un shopping, y hasta tuvimos la suerte de encontrar cerca de ahí una feria de colectividades. Esto fue muy interesante porque contaba con varios stands dedicados a la gastronomía típica de diferentes países. También algo de artesanías, y llegamos justo para escuchar a la orquesta municipal que tocó unas cuantas canciones tradicionales. Luego de recorrer los diferentes puestos me decidí a comprar en el de Grecia una porción de baklava. Este es un pastel elaborado con pasta de nueces trituradas y masa fila, y bañada en almíbar o jarabe de miel. Estaba absolutamente rico, aunque también debo decir que era algo muy dulce y  pesado.
lobos marinos

Para no dejar de ver algo que es bastante conocido de la zona, dimos una vuelta por el casino. Jugamos algunos pesos en las maquinitas, aunque como era de esperar enseguida los perdimos. Valió como experiencia, para mí la primera vez que jugaba algo en un casino (pensé que iba a tener suerte de principiante, pero no fue el caso).
lobos marinos descansando

Tuvimos la oportunidad de ver ese día a los lobos marinos, que descansaban en una zona cerca del puerto. Hacía un frío bastante importante, soplaba un viento helado en ese lugar, así que fue rápida la visita que le hicimos a estos animalitos, que por otro lado no hacían mucho más que estar ahí echados y bufar un poco.
Orquesta municipal en la feria de las colectividades

Algo rico en un puesto de la feria
Centro de la feria, mesitas adonde sentarse a comer algo rico
El día siguiente resultó más soleado, aunque el frío se hacía notar igual. Aprovechamos a dar otra vuelta por las playas. Esta vez bajamos a la arena, así que disfrutamos un poco más del mar. Por supuesto que nadie se estaba bañando ahí, salvo algún valiente perro que chapoteaba entre las olas heladas.

Hermoso el mar
Contemplando el mar. Bello momento.
Caminata por la playa
A la hora del almuerzo escogimos un restaurante cuyos ventanales daban al mar. La vista lindísima. Un mal tranquilo y bastante azul (diferente al día anterior en que por las nubes se veía muy gris), gaviotas que volaban por ahí. Pedimos unos mejillones empanados, que estaban riquísimos. En una zona tan cercana al mar no podíamos dejar de probar algo sacado de ahí.
pescadores



 
perrito disfrutando del agua
Me habían dicho que las medialunas de la confitería Boston eran algo digno de probar, así que la merienda la hicimos en ese lugar. También tenía vista a la playa, y pude comprobar que la reputación era cierta. Muy ricas, y el cafecito caliente sentaba de maravillas también.

Ya luego de haber dado varias vueltas por ahí no quedaba otra que emprender el camino de regreso a Buenos Aires. Nuevamente encontramos la ruta despejada y tranquila, así que el viaje fue realizado sin inconvenientes.

Hace mucho que no visitaba el mar. Creo que habían pasado más de diez años desde la última vez. Por otro lado esta ciudad costera tan conocida y mencionada por todos era un sitio en el que no había estado, así que fue lindo haberla visitado.

Vista desde el restaurante donde almorzamos

mejillones empanados
monumento a Olmedo
También estuvo buena la forma en que surgió la idea de la escapada, muy de un día para otro, sin mayores planes.

Lo otro que hizo de este un viaje excelente fue la compañía. ¿Quieren saber con quién me fui? Pues con una personita del sexo masculino que conocí hace unos meses, con quien estamos de a poquito formando algo lindo. No les había mencionado a esta persona, tal vez a modo de cábala, tal vez porque quería ir viendo en que se convertía la relación. En fin, les puedo decir que luego de los sucesos de fin de año (separación de por medio y etc) la vida me hizo llegar a alguien que se está convirtiendo en una persona especial, que se roba muchos de mis pensamientos, que ya tiene un lugarcito en mi corazón. Fue de alguna manera una sorpresa. O no. Porque en realidad la forma en que se han dado los acontecimientos me hace pensar que tenían que darse de esa manera, que el universo sabio sabía lo que hacía, que no fueron solo casualidades. Creo que me estaba dando una oportunidad de crecer, de aprender cosas, de replantearme rumbos.
 

Este año lo empecé dejándome sorprender por la vida, dejando fluir las cosas. Aceptando lo que se daba, y con un profundo sentimiento de que algo bueno estaba por venir. Siempre lo sentí así, aunque solo tenía un libro en blanco ante mí. Y no me equivoqué. Por lo menos por ahora, todo lo que estoy viviendo es hermoso. De a poquito, dejando que todo avance de forma natural, porque creo que así es como se dan mejor las cosas. Disfrutando lo que se da, tratando de no presionarme en nada, dejando que todo fluya, animándome a abrir mi corazón nuevamente. En fin, sonriéndole a la vida, que es lo importante.

Después de estos meses quería compartir esto con ustedes. Este motivo de alegría, tal vez de nuevos sueños. El inicio de un camino, que no sé adónde me llevará, ni que tan largo o no será, pero que hoy me animo a recorrer, disfrutando lo que en él aparece.

Muchos de ustedes hace rato me leen. Ya saben que mi forma de encarar la vida es con optimismo y agradecimiento profundo a todo lo que el universo me da. Ya saben que me gusta encontrarle motivo de felicidad a las cosas que me pasan, aún las más cotidianas.

Hoy también quiero expresar esta gratitud a la vida. Me siento feliz ante la nueva oportunidad. Mi mensaje hacia el universo es un gran GRACIAS, de saber que nos hace llegar cosas buenas, y quiero cerrar el post con: “lo mejor está por venir”.